Cada cenáculo (grupo de oración) debe fomentar su crecimiento de tal forma que llegue el momento en que, debido a su gran tamaño, sea necesario que se divida en otros grupos más pequeños hasta que en las áreas principales de cada ciudad existan cenáculos grandes así como pequeños. Todos los cenáculos entonces se vinculan unos con otros a través de dos o tres de los organizadores principales dentro de cada cenáculo y se mantienen informados vía correo electrónico. Varias veces al año, todos los cenáculos de cada ciudad deben reunirse en un servicio religioso dentro de la Iglesia para orar por la Misión, por su país/ estado/ ciudad y compartir, como comunidad, el éxito y la siguiente etapa de las metas más importantes de la Misión.
La implementación de las metas más importantes de la Misión como se indica a continuación, se lleva a cabo a través de estos delegados de cada cenáculo, que asisten a las reuniones que se organizan en determinadas fechas durante el mes, en cada ciudad. De acuerdo con el nivel de las metas, ya sean locales o nacionales, todos los delegados designados de cada ciudad (uno/dos), se reúnen para formalizar la estrategia y calendario para todas las campañas nacionales.
Vincular a todos los Cenáculos a: Las Tareas Locales/Nacionales: Metas más Importantes
Comenzar a trabajar en la consagración (o renovación de la misma) de tu país o estado, ciudad o diócesis, a los Dos Corazones.
Comenzar a trabajar en el establecimiento de Capillas de Adoración Perpetua (especialmente en las parroquias que se encuentran en áreas de alta criminalidad).
Comenzar a promover la Misión y ayudar en la formación de más Cenáculos (grupos) de Oración.
Comenzar a difundir el material de la Misión sobre el Cambio Personal, la Iglesia y sus Sacramentos.
Comenzar a establecer cenáculos de oración para adolescentes y jóvenes.
Comenzar a unirse con aquellos de ideas afines para decir “NO” a las cosas del dominio público que ofenden a Dios (por ejemplo: los medios de comunicación, planes de estudio en las escuelas, inmodestia en el vestir, etc.) Esta también es una Tarea Nacional.
Comenzar a vincularse con las organizaciones ya existentes para trabajar conjuntamente en la erradicación de las más grandes abominaciones contra Dios en el mundo actual. Por ejemplo: el aborto, inmoralidad (perversión, sexo entre adolescentes, adulterio, pornografía, etc.), y la injusticia social. – Esta también es una Tarea Nacional.
